Cuando el Huracán Wilma devastó en Cancún en octubre del 2005, muchos residentes temieron que sería el fin del turismo caribeño mexicano, con hoteles imponentes y playas seductoras, pero mientras despejaban los escombros, los propietarios de los hoteles y los funcionarios del gobierno decidieron darle a sus playas y hoteles, su mayor renovación desde que fue fundado en 1970, se tiene registrado como el siniestro más costoso que haya habido en México, incluso superó los costos por daño de lo que fue el huracán Gilberto en 1998. Y la verdad, nunca pense que en menos de dos años regresara a ser el Cancún que yo había conocido, es impresionante.
domingo, 21 de diciembre de 2008
Huracán Wilma en Cancún
Etiquetas:
Cancún,
Desastres Naturales,
diiversión,
Huracán,
Huracán Wilma,
Royal Holiday Club,
turismo,
turismo caribeño,
Vacaciones
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario